Que bueno es regresar al mundo "virtual" de X-Box Live. Después de algunos meses de ausencia nuevamente tomo el control de mi consola y empiezo a recorrer las calle de Gotham. Lo peor fue darme cuenta de que todos a los que conozco ya han subido de nivel. Según yo corriendo solo aprendería a correr... y que decepción!
Ahora me encuentro con una dama muy culta, que me daba etimologías de cualquier palabra --léase mutear--, además hacia referencia a las películas de Costner (Tatanka). Pero eso no es lo mejor, resulta que es maestra del laminazo (y no es un baile norteño). Yo bien verde, inicio mi carrera y conduzco como si nada, la rebaso pero... no contaba con que ella es una maniaca del volante. Solo bastó tomar la primera curva y encontrarme estampado en la barda de contención, viendo para no se donde y ¡en último lugar! No hay respeto ni siquiera en línea.
La moraleja de esta historia es, aprende a conducir como taxista, no respetes ni siquiera a la más dulce voz de Live, porque no sabes lo que te espera antes de las curvas.
Para que vea que no hay rencor y para variar, no pondré una de mis fotos. Le daremos la estafeta por hoy y pondré un bonito paisaje de Ixtapa que capto a través de su lente.
P.D. Nos vemos en Halo 2, porque no habrá tregua.
martes, julio 26, 2005 | Publicadas por MyPandawan a la/s 11:17 p.m. |
Faros vemos, lamineros no sabemos
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